Sunday, January 31, 2010

Una chica interesante. Introducción a la economía de mercado, 2.


Decíamos ayer que para hacer más sostenible la economía, nos debíamos de preocupar en hacer más ligera la mercancía, pero en ningún caso bajar el ritmo alegre de las transacciones mercantiles. Llegué a proponer un cambio de besos por petróleo. Claro, no pensé que gasolineras de éstas a pie de carretera, donde en lugar de gasolina de 95 octanos puedes comprar besos, existen desde antes de los combustibles fósiles, por más que nuestros gobernantes se empeñen en clausurar los Club Ribiera de turno.

Pero donde se hace inoportuno el ejemplo es en otra parte: cuando para que compres gasolina te venden besos. Con el fetichismo de la mercancía hemos topado... Se trata de una perversión que sirve tanto para vender merluza como para vender países. Frente a estos besos estamos más vendidos que dentro de un puticlub.

2 comments:

  1. Fíjate que están ciertamente trilladas estas imágenes, pero ésta me ha encantado de verdad ... de la buena.

    Saludos!!

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